La protección a la propiedad intelectual fortalece al sector agrícola del país
Boletín de prensa No. 121
Quito, 30 de agosto de 2018
Para difundir y fomentar el derecho de obtentor como una herramienta de propiedad intelectual para la innovación agrícola, la transferencia de tecnología, el acceso al conocimiento y la garantía de la investigación y desarrollo agrario del país, hoy, se desarrolló el seminario: Derecho de Obtentor, el Convenio UPOV y sus beneficios para la promoción de asociaciones público-privadas, así como la transferencia de tecnología para el desarrollo.
Los derechos de obtentor son los beneficios que obtiene la persona que, producto de su labor investigativa, haya creado una variedad vegetal de cualquier género y especie y que sea nueva, distinta, homogénea y estable.
En la actualidad, agricultores, instituciones de investigación, empresas multinacionales o personas a título personal trabajan para obtener nuevas variedades vegetales, que son necesarias y rentables para aumentar la productividad, la calidad y la capacidad de comercialización de los agricultores y cultivadores, por lo que necesitan que se reconozca su trabajo y se garantice su derecho a la propiedad intelectual.
De acuerdo a la subsecretaria General de Educación Superior, Gabriela Suárez, en un país como Ecuador, fortalecer el campo agrícola es clave para que la economía dé pasos firmes enmarcada en el desarrollo de la matriz productiva. “Potenciar los recursos naturales que poseemos es aprovechar al máximo nuestras capacidades y destrezas”.
Suárez señaló que para esto se debe trabajar desde los derechos intelectuales, la protección a las investigaciones y la transferencia de tecnología agrícola; y que el Gobierno seguirá adelante con este y otros proyectos que nos permitan avanzar en esta línea vital de desarrollo.
“Esperamos que estos días de trabajo sean de gran provecho y que los esfuerzos que hacemos como instituciones sean fructíferos en el desarrollo de nuevas variedades vegetales, dando paso a un desarrollo agrícola competitivo a nivel internacional y sustentable”, finalizó.
En esta línea, la Embajadora de la Unión Europea en Ecuador, Marianne Van Steen, destacó que los derechos de obtentor son necesarios en Ecuador, debido a que las principales exportaciones que nuestro país tiene con la Unión Europea son productos agrícolas.
Explicó que nuevas variedades vegetales que sean más resistentes a plagas y se adapten mejor a las condiciones locales, mejoran la productividad y permitirán que el consumidor tenga una oferta variada abriendo nuevos mercados y desarrollando una mejor competitividad industrial.
Sin embargo, señaló que debido a que la obtención de nuevas variedades vegetales requiere una inversión considerable en técnicas, mano de obra, recursos materiales, dinero y tiempo, pueden tardar más de 10 a 15 años en salir al mercado.
Por lo que la protección de la propiedad intelectual es un incentivo para que los obtentores se sientan protegidos y sigan creando nuevas variedades de vegetales, contribuyendo así al desarrollo sostenible de la agricultura.
Además, para el representante de la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales – UPOV, Leontino Taveira, los derechos de obtentor promueven las colaboraciones entre la investigación pública y los actores del sector privado, lo que contribuye que los agricultores obtengan material de siembra de calidad y la información necesaria para su mejor aprovechamiento.
El director del Servicio Nacional de Derechos Intelectuales, Santiago Cevallos, por su parte, resaltó la importancia de la cooperación internacional para el Ecuador. “El apoyo de la Unión Europea es vital para el desarrollo del conocimiento, su ayuda y colaboración es valiosa en este cometido».
Es así que el Seminario que tendrá como duración dos días, plantea la importancia de crear y fortalecer un sistema efectivo de protección a las obtenciones vegetales, una forma de alentar la creación de nuevas variedades que beneficien la agricultura, eje central que mueve al Ecuador.