Boletín de Prensa No. 080

Quito, 1 de abril de 2014

La ciencia y la tecnología son indispensables para alcanzar el Buen Vivir

Yachay es una forma de decir “adiós a la mediocridad” y una apuesta a romper la tradición de dependencia que mantiene el Ecuador con los países que ejercen hegemonía en las áreas científica y tecnológica, manifestó René Ramírez, notablemente emocionado durante su intervención en el acto inaugural del proceso de nivelación de los 187 primeros estudiantes de la Universidad de Investigación de Tecnología Experimental Yachay, este lunes 31 de marzo de 2014.

El evento marca el punto de partida de las actividades académicas de este centro de estudios superiores, localizado en el cantón Urcuquí, provincia de Imbabura. En este campus, los jóvenes cursarán estudios por 20 semanas. Tras la aprobación para su ingreso, los alumnos podrán optar por estudios en carreras de grado científico y carreras de grado profesionalizante. En las primeras se ofertan: Ciencias de la Vida, Tecnologías de la Información y Comunicación, Nanociencias, Energías Renovables, Petroquímica; las segundas ofrecen Ingeniería en Bio-farmacología, Ingeniería en Software, Nano-ingeniería, Ingeniería en Energía e Ingeniería de Polímeros.

La Universidad Yachay es la obra emblemática de la revolución de las ideas y uno de los pasos más importantes para construir una economía basada en la generación de conocimiento y tecnología, encaminada a conseguir el cambio de matriz productiva.

“Hay que construir un sistema que nos permita salir del neo dependentismo”, dijo René Ramírez, precisando que “la generación de conocimiento afirmará la segunda y definitiva independencia del Ecuador”.

Sirviéndose de una analogía, el titular de la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación, manifestó que, así como el 26 de julio de 1972 fue el inicio de la explotación petrolera en el Ecuador que dio paso al boom económico basado en la extracción de ese recurso natural, este 31 de marzo de 2014, en el centro de Tecnología Experimental Yachay, inicia el nuevo boom: el del conocimiento, orientado a formar el talento humano necesario para marcar un cambio sustancial en la economía ecuatoriana, cimentado en la generación y exportación de conocimiento y tecnología.

En la ceremonia inaugural el Presidente de la República, Rafael Correa, suscribió el Decreto Ejecutivo para la constitución de la Comisión Gestora de la Universidad Yachay. “Gran parte de la segunda independencia es convertirnos en generadores de conocimiento”, expresó el Primer Mandatario en su intervención ante estudiantes, autoridades y docentes del inaugurado centro de estudios.

Uno de los miembros de la Comisión Gestora es Ares Rosakis, decano de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Aplicadas del Instituto de Tecnología de California (EE.UU), y embajador de esta joven institución, quien exaltó la visión ecuatoriana de emprender la construcción de un centro de estudios que promueva la investigación científica y desarrollo de talento humano con vinculaciones directas entre la academia, el tejido empresarial y las instituciones gubernamentales.

En su discurso, Rosakis subrayó la visión que tiene esta universidad para convertirse en líder regional en el desarrollo de una economía basada en el conocimiento. “Es el proyecto más ambicioso de nuestros días, enfocado a cambiar el destino económico del Ecuador”, señaló.

La primera promoción de estudiantes de Yachay, protagonistas de la historia

Daniela Armijo es parte del grupo de estudiantes que inició su periodo de nivelación en el Centro de Investigación Experimental Yachay. Ella intervino en representación de sus compañeros en el acto inaugural para mostrar la emoción de ser parte del grupo con el que arrancan las actividades académicas en el centro de estudios, emblema de la revolución en educación superior en el país.

La mañana de ese lunes 31 de marzo, Alberto Olivares, Bruno Sandoval, Bernardo Guerrero y Sebastián Cortez, tuvieron su primer contacto con sus maestros. Alegres y bromistas estos jóvenes oriundos de Salinas (Santa Elena), explicaron sentirse motivados por la trayectoria investigativa de los profesores Ph.D que conforman la planta docente de Yachay.

Ellos se han separado de sus familias y su tierra natal para ir en busca de sus aspiraciones profesionales. “Es muy emocionante ser parte del cambio”, dijo Sebastián Cortez, quien confesó sentirse “inspirado” al escuchar las experiencias investigativas de sus maestros.

Hamilton Ramírez es lojano y ahora vive en una de las 33 residencias habilitadas en el Centro de Investigación Experimental Yachay. Él explicó que los espacios dispuestos para los estudiantes son cómodos y el campus ofrece beneficios para la actividad estudiantil, pues está alejado de ruidos citadinos y contaminación.

El desafío país comenzó. En el talento y creatividad de los jóvenes se ancla la esperanza de abrir el camino hacia la Economía Social del Conocimiento.